Prohibido fumar en el escenario

La venganza de la Petra (Carlos Arnirches)

ACTO PRIMERO. ESCENA XIV 

PETRA, EUDOXIA y NICANORA. Aparecen las tres con sendos pitillos encendidos en la boca, chupando torpe, pero ansiosamente. 

NICANORA. ¡Echa bien por ahí!... ¡Echa bien por ahí!
EUDOXIA. Mire usted, si yo parezco el tren. He hecho una nube.
PETRA. No, pues yo no me he quedado atrás, que hay que ver la humareda que he armado.
NICANORA. Pues yo comienzo a toser y no adelanto nada.
PETRA. Y eso que a usted le ha tocado un cigarro muy flojito; pero yo me estoy peleando con uno, que vaya... (Sigue fumando en la forma indicada.)
EUDOXIA. Pues el mío parece de mi pueblo: no hay quien haga tirar. (Fuma con gran esfuerzo.) ¡Qué condenso!

Así era una de las escenas de una de las obras que los alumnos van a representar. Pero debido a que los alumnos no iban a fumar de verdad (y siendo así, no iba a quedar creíble) y por motivos de ritmo; en diciembre se decidió suprimir. Y menos mal que se hizo, porque si no huera sido así, ahora quizá nos veíamos en un aprieto, como les han ocurrido a algunas obras profesionales, por la nueva ley antitabaco. 

El Ministerio de Sanidad no deja lugar a dudas. En sus declaraciones asegura que si un actor fuma dentro de un teatro es ilegal por partida doble: «En primer lugar, porque la actual ley prohíbe consumir tabaco en espacios públicos cerrados, como son las salas teatrales; y en segundo término, porque el teatro es también el lugar de trabajo para los actores y el resto del equipo de la obra, por lo que se estaría incumpliendo la prohibición de fumar en los centros de trabajo».

Ahora para seleccionar una obra para representarla en el colegio, además de tener en cuenta si su temática es idónea para un público adolescente, su duración, si es divertida, cómo son los personajes, etc., también hay que comprobar si su argumento cumple con la normativa. En fin, una labor cada vez más complicada. Que le vamos hacer.